Para todas las
personas que pasaron alguna vez por mi vida y, en especial, para aquellas que
se quedaron. Necesitaría otras cincuenta vidas para darles las gracias porque sin ellas no habría sido nada.
Cincuenta lunas de fuego,
y cincuenta blancos soles.
Son cincuenta amaneceres
arropada
en mis amores.
Hay cincuenta mediodías
y cincuenta
oscuras noches.
Cincuenta golpes de látigo
en forma de mil
dolores.
Cincuenta besos
a tiempo
y cincuenta olvidos
largos.
Cincuenta llantos sentidos.
Cincuenta palabras
de ánimo.
Cincuenta valientes
sueños
y cincuenta
desengaños.
Cincuenta
abrazos de amigos.
Mi cincuenta
cumpleaños.