11 de noviembre de 2024

¡Cómo va pasando el tiempo! Poema de juventud.

¡Cómo va pasando el tiempo!

Se escapa de entre mis manos.

Ayer no es ya sino historia.

Mañana pronto ha acabado.

Los minutos ya no existen.

Ni siquiera los nombramos.

¡Cómo va pasando el tiempo

mientras vivimos y amamos!

Pero cuando el sufrimiento

corta el camino trazado,

el reloj se para,

no corre,

no nos contagia su paso.

Y los días son eternos,

los segundos se hacen años

hasta que un día amanece

y se va de nuestro lado.

¡Cómo va pasando el tiempo

sin apenas cuenta darnos

y dejamos por vivir

mil historias que han volado!

Ya no volverán los días

que de juegos nos llenaron,

ni habrá ya un primer amor

que nos cobije en sus brazos.

Mas latiendo el corazón

no está todo terminado

y, aunque va pasando el tiempo,

no todo el tiempo ha pasado.


Valladolid, 1986.



8 de noviembre de 2024

Las historias escritas.

MICRORRELATO

Aquellas palabras, escritas con un amor sin medida, parieron una historia. Cuando tuvieron forma y estaban listas para entrar en el corazón de las personas, buscaron un lugar con un tejado firme para cubrirse de las inclemencias de los hombres y mujeres de cabeza hueca, pero el viento arrollador de unos bárbaros arrasó con todo. Con todo, menos con ellas, porque la historia que habían escrito vivían ya al cobijo de algunas mentes lúcidas que nunca las dejarían morir.

23 de octubre de 2024

Los listillos 😊

LOS LISTILLOS 😖

Con la edad, cada vez me paro más a observar lo que hace la gente a mi alrededor e intento adivinar los motivos que llevan a algunas personas, familiares, amigos o conocidos, principalmente, a creer que son más inteligentes que tú, cuando en realidad son solo unos listillos resabiados y, la mayoría de las veces, aprovechados y malas personas. Algunos, incluso, son verdaderos profesionales de la desvergüenza.

Me hace mucha gracia esa gente que se pasa el día alardeando de haber contestado tal o Pascual (de malas maneras casi siempre porque de educación andan escasitos), armándose de razón porque la otra persona no le ha replicado, sencillamente porque se da cuenta de que no merece la pena, porque sabe que su nivel intelectual está un poco limitado o porque intuye que, como van sobrados de mala leche, se va a liar un pollo de cuidado y prefiere dejarlo estar; o aquellos que se ríen a carcajada limpia cuando se cuelan en una fila porque les parece que así son más desenvueltos y sagaces que los demás, sin pararse a pensar en lo incívico de su actitud; o los que se aprovechan del trabajo de otros y se regodean de ser la rehostia de listos por no haber dado un palo al agua y haberse llevado las palmaditas en la espalda, llegando, incluso, a ofrecer ese trabajo a otras personas, como si fuera de su propia cosecha, cuando en realidad, ni siquiera saben cómo meterle mano; o los que no respetan las normas ciudadanas básicas porque no conocen la palabras empatía, respeto y solidaridad, entre otras, ya que siempre hacen lo que les va bien a ellos en cada momento y en cada lugar; o esos que no se acuerdan de ti nada más que cuando necesitan que les resuelvas algo y te pasan el jabón por el lomo creyéndose que picas ante el peloterío precedente a lo que realmente van a buscar; o los que pretenden utilizarte para llenar los huecos vacíos en su calendario; o los que lo saben todo y todo lo discuten, aunque no sepan de casi nada, pero lo que dicen ellos va a misa; o los que se pasan el día dando pena para preparar el camino y ver si te la cuelan y les solucionas, con toda tu buena fe, algún problema económico; o los que aprovechan un regalo bonito que les has hecho con todo el cariño para endosárselo a otro porque así no gastan dinero y, cuando ellos te hacen el regalo a ti buscan y rebuscan hasta dar con lo más barato (así de cutres son); o los que nunca llevan dinero encima a la hora de pagar o, en ese mismo momento, les entran ganas de ir al baño; o los que aprovechan para comer y beber lo más caro de la carta solo cuando saben que se va a pagar a escote; o los que te dejan de hablar porque les incomoda verte la cara después de haberse portado contigo como unos sinvergüenzas...

Y todo ello lo hacen levantando bien la cabeza para que todo el mundo sepa lo listos que son, aunque, en realidad, solo muestren una cara más dura que el cemento armado. Se enorgullecen de su listeza y, de paso, creen que que los que están enfrente son tontos, simplemente porque se callan, todo ello sin sin darse cuenta del inmenso ridículo que hacen (o sí, que ya se sabe: dame pan y llámame perro).

Y, claro, cuando alguien se harta y les saca los colores al decirles que ya no cuela, inmediatamente pasan al ataque, borde y poligonero casi siempre, porque no soportan ver que has dejado al descubierto su ignorancia, su caradura, su soberbia, su raterío o, lo que es peor, su maldad. Y entonces, pasas a ser el malo. O la mala. 

A mí los listillos nunca me han aportado más que decepción (a veces, también risa), al ver sus formas de actuar tan ridículas, tan retorcidas, tan chabacanas o tan aprovechadas. Y, casi siempre, tan burdas y descaradas.

Algunas de esas personas, antes muy queridas, ahora me dan mucha pena. Solo pena. Y, a veces, risa, mucha risa. ¡Ah! Y ya no me callo… 😊



10 de noviembre de 2023

La carta que nunca te escribí, Crohn

 

Llegaste a mi vida sin permiso

en forma de río inabarcable,

de meteoritos que rompían mis entrañas,

de huracanes maquiavélicos de viento,

de mares violentos de cristales,

con sangre que manaba de mi vientre

haciendo de mis noches y mis días,

un manto de ceniza insoportable.

 

Tomé la decisión de detenerte,

y alcé un muro para frenar tu avance,

mas, enfurecido, comenzaste a vomitar

de mi abdomen las piedras curativas

como expulsan los volcanes,

furiosos y voraces, su lava incandescente,

partiendo en mil añicos mis glaciares

abruptos, exhaustos y malheridos,

en una cruenta guerra en la que yo,

no permitía que de mi cuerpo

pudieras llegar a alimentarte.

 

Y lleno de indignación, enojo y rabia,

decidiste que entraran, una y otra vez,

los cuchillos afilados en mi cuerpo

como castigo cruel a mi valor,

a mi osadía y a mi constancia,

partiendo en mil pedazos mi universo.

 

Y yo me armé de un valor desconocido,

buscando mi venganza en mil batallas

para que en la mutilación de mis caminos

no pudieras ni vencerme, ni engañarme, ni abatirme,

ni exigirme con tu clásica soberbia

que mis manos blandieran una bandera blanca.

Y no te dejé colocar tu espada en mi cabeza,

ni que borrases de mi rostro la sonrisa,

ni que consiguieras, a pesar de tus esfuerzos,

que te odiase, porque no estaba sola en esa guerra.

A mi lado había gente que me amaba

y que hacía de mi mar, un mar en calma.

 

Y mientras tanto, silenciosos, mis soldados interiores

se aliaron con ejércitos de gente sanadora

que hacían de mis breves despertares

miradores de horizontes de la vida

que tenían todo el peso en mi balanza,

y ahuyentaron con el humo de su hoguera

cualquier atisbo de ataque a mi esperanza.

 

Y aquí estamos ahora, tú y yo, en punto muerto.

Yo te muestro mi indiferencia y tú,

tú no avanzas.

No somos amigos, no, ni lo seremos,

que con tu forma de ser casi me matas.

Pero sí sé que estarás ahí dentro, al acecho,

esperando que aflojen mis defensas,

y me hallarás siempre mirándote a la cara.

No te quiero ni ver, pero te veo, cruel enemigo,

aunque, ¿sabes qué?

Jamás podrás llegar a mi alma.

2 de septiembre de 2023

Un cero para el primero


 2️⃣ / 9️⃣ / 2️⃣0️⃣2️⃣3️⃣ 👩‍🏫

Hoy hace un año desde que me jubilé. 

Este verano me preguntó mi amiga Marga qué valoración le daba de cero a diez a este primer año sin ir a trabajar. Mi respuesta fue inmediata: CERO. 

Cero a pesar del amor de mi pequeña familia; cero a pesar de mis viajes; cero a pesar del cariño de mis amigos; cero a pesar de mi Atleti; cero a pesar de los libros leídos, de los conciertos y del cine y el teatro disfrutado; cero a pesar de la música sanadora, CERO. Este año he perdido a mi madre y eso hace que sea mi "annus horribilis" particular. 

Sería injusta si dijese que no me han ocurrido cosas buenas y que no he vivido momentos bonitos. Sería injusto decir que no he reído. Claro que sí, pero este 2023 he perdido mis raíces, mis ramas y mis hojas. Y he llorado, sigo llorando muchísimo.

Ahora yo soy el tronco y me aferro a la raíz que yo misma planté, de la que salen las flores más bonitas y hacen que mi jardín sea verdaderamente hermoso. Además, está adornado de algunas otras plantas con las que comparto la savia de la vida y al que se han añadido otros árboles que me dan sombra cuando el sol me quema de verdad y me seca sin remedio.

Espero que este nuevo año de jubilada que comienzo hoy sea tranquilo, familiar, divertido, amoroso, activo, saludable y viajero, porque a pesar de que en mi corazón hay ya huecos importantes (mis padres jamás serán un hueco porque su espacio está lleno siempre), sé que tengo que continuar mi vida como hasta ahora, siendo igual de generosa, transparente, familiar y honesta. Eso es lo que mis padres desearían que hiciese y eso haré.

A todos los que se han alejado y han abusado de mi buena voluntad, gracias porque me han enseñado que no todo el mundo merece mi preocupación ni mi cariño. De los errores también se aprende. 

A los que estáis en mi vida, mil millones de gracias. Eso no hay dinero que lo compre. Os quiero. ♥️

2 de mayo de 2023

TUS BESOS

POEMA DE JUVENTUD

Besas como si fueras a comerme.

Besas besos de mar, a dentelladas.

Tus manos en mis sienes y abismadas

nuestras miradas. Yo, sin lucha, inerme.


Me declaro vencida si vencerme

es ver en ti mis manos maniatadas.

Besar besos de sol. A bocanadas

beber tu vida. Sin dolerme.


Tirar de tu raíz, sorber tu anhelo

a flor de labio. Cerrar los ojos,

mecerme y rozarme con tu aire

y buscarte con mi boca enamorada.


Si al cerrar los ojos para verte,

un beso de tus labios me bastara, 

deséame en tu sueño cada noche

y húmeda mi boca estará al alba.

21/03/1980

QUISIERA

POEMA DE JUVENTUD

Quisiera ser poema y describirte.

Quisiera ser canción para cantarte.

Quisiera ser el aire y envolverte,

y quisiera ser amor para adorarte.


Quisiera ser sonrisa y sonreírte.

Quisiera ser boca para besarte.

Quisiera ser vida y así vivirte,

y quisiera ser el viento y abrazarte.


Quisiera ser el mar para cubrirte.

Quisiera ser tiniebla y ocultarte.

Quisiera ser calor para sentirte,

y quisiera ser la luz para mirarte.


Y yo quisiera ser, dentro de ti, tu alma,

para tu suspiro ser y suspirarte.

24/10/1979

19 de marzo de 2022

Mi padre. In Memoriam.

Mi primer día del padre sin ti, papá. Te echo mucho de menos, aunque sigues conmigo. Cuídame, allá donde te encuentres. Te quiero.


MI PADRE. 

Te fuiste apagando poco a poco

en el débil resplandor de aquella llama.

Lágrimas se derramaban entre gritos

inundando el océano de tus mejillas blancas,

con el eco de una única palabra, ¡MADRE!,

que vivía alojada en tu garganta.

Miedo a la otra vida.

Miedo a la nada.

Tú no querías perder

el soplo de vida que te quedaba. 


Ya no estás en esta tierra leve,

pero sigues aquí.

Y seguirás en cada instante,

en cada recuerdo,

en cada lugar que fue tuyo,

en cada sonrisa a medias,

en cada palabra franca.


Tus silencios y los míos,

que son ya solo nuestros,

permanecerán intactos

en mi corazón que es tu casa,

y aquí sentirás el calor 

de esta paz que ahora te abraza.



21 de junio de 2021

Me gustaría…

 ME GUSTARÍA…

Poder ser dos; que los días no fueran inexorablemente monocromáticos; que los minutos estuvieran llenos de silencio, arropados por la ausencia de dolor; poder disfrutar de un tiempo de descanso, aunque fuera breve; no vivir lo que toca, aunque toque; no perder la esperanza nunca, ni siquiera en estos momentos; saber contener el llanto, esperando que algún día derrame todas las lagrimas juntas y limpien estos ojos cansados; ser azul como el cielo, como el mar, y poder mirar el infinito estando en calma, satisfecha conmigo misma por estar haciendo todo lo que puedo y más.

Me gustaría saber que me espera un abrazo de esos que devuelven a su forma todos mis cachitos; creer en la bondad del ser humano; saber que a mi alrededor no hay engaño ni maldad; desterrar miedos y personas que no me merecen; seguir siendo fuerte, aunque a veces me rompa, y feliz, muy feliz.

Mientras tanto, la vida continua lenta, estirando algunos momentos más de lo deseable, cargada de momentos difíciles y llena, para mí, de sentimientos encontrados.  

Esto también pasará. 😔

25 de noviembre de 2020

Por ellas, para ellas

Por tantas a quienes quitaron

del corazón su latido.

Por aquellas que dejaron

su familia en el camino.

Por todas las que callaron

marcando así su destino.

También por las que intentaron

huir de sus asesinos.

Por quienes siempre lucharon

y nunca han enmudecido,

alzando su voz al viento

para escapar del  olvido.

Y también por esos hombres

valientes, libres, amigos,

que con su voz defendieron 

nuestro espacio femenino.